Nuestro viaje comenzó con la maravilla de los tranvías 🚋. Estos pequeños gigantes eléctricos nos llevaron a través de calles adoquinadas y sobre los característicos canales, proporcionando una manera cómoda y pintoresca de movernos por la ciudad.
Uno de los puntos culminantes de nuestra aventura fue, sin duda, la visita al Museo Van Gogh 🎨. Sumergidos en la obra del maestro, quedamos maravillados por la intensidad y el color de sus pinturas. Caminar entre sus obras más famosas, como 'Los Girasoles', fue una experiencia emotiva. Salimos del museo con una nueva apreciación por su genio.
Nuestros paseos por el Barrio Rojo y Jordaan revelaron la diversidad y el carácter de Ámsterdam, desde su historia hasta su vibrante vida nocturna.
Pudimos disfrutar de un par de restaurantes, fueron acogedores, donde la cocina internacional y los sabores locales se mezclaron de manera deliciosa 🍽️.
Ámsterdam, gracias por los recuerdos. ❤️